La imagen de Dios en el hombre
La imagen de Dios es la razón. Porque Dios es verdad la imagen debe ser la razón. La comunión con él, un propósito muy importante en la creación, requiere pensar y comprender. Sin razón, el hombre sin duda glorificaría a Dios como lo hacen las estrellas, las piedras y los animales, pero no podría disfrutarlo para siempre. Aunque en la providencia de Dios los animales sobrevivan a la muerte y adornen el mundo futuro, no pueden tener lo que la Escritura llama vida eterna porque la vida eterna es conocer al único Dios verdadero, y el conocimiento es un ejercicio de la mente o razón. Sin razón no puede haber moralidad ni rectitud: éstas también requieren pensamiento. Sin estos, los animales no son justos ni pecaminosos.